- Su Centro Histórico cuenta con mil 113 edificios que le valieron el reconocimiento como Ciudad Patrimonio de la Humanidad.
Como el principal enclave receptor del turismo que llega a Michoacán, Morelia, declarada como Ciudad Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, concentra un amplio catálogo de opciones para ver, hacer y recorrer solo, con amigos, o en familia.
Como ejemplo, el secretario de Turismo del estado, Roberto Monroy García, destacó que existe un gran catálogo de recorridos turísticos temáticos, desde el básico tour de ciudad, hasta el de leyendas y museos, así como los recorridos que salen de la capital hacia el interior del estado.
Tan solo su Centro Histórico la ciudad cuenta con mil 113 edificios construidos con cantera rosa, que gracias a su estado de conservación, le valieron ser parte de las casi 200 ciudades del mundo reconocidas por la Unesco.
Entre los sitios imperdibles que todo viajero debe conocer si está en la capital michoacana se encuentra:
• El Conjunto Arquitectónico de Las Rosas, partiendo desde el bello jardín donde los árboles, las fuentes y los cafés al aire libre le dan un aire agradable y bohemio, incluye el templo de Santa Rosa de Lima, único edificio moreliano donde las gárgolas representan figuras zoomorfas y uno de los pocos inmuebles que conserva el antiguo retablo de primorosa manufactura; comprende también el Conservatorio de Música considerado como el primero de América Latina, actualmente en uso.
• El óleo “El Traslado de las Monjas Dominicas a su Nuevo Convento en Valladolid”, obra de 1738 que alberga el Museo Regional Michoacano. Es la imagen más antigua que hay de la ciudad. Joya y testimonio documental que brinda información sobre la arquitectura, costumbres, jerarquías sociales, y órdenes religiosas presentes en la Valladolid Virreinal.
• El Instituto del Artesano Michoacano, tienda y museo. Una mirada a la enorme riqueza y destreza artesanal que tiene Michoacán en todas sus regiones. El visitante encontrará ahí objetos de ornato y piezas utilitarias que conservan su raíz prehispánica y el uso de gran cantidad de materias primas.
• El Museo del Dulce, un espacio donde el público puede conocer de manera directa la forma de preparación de los ates que le dan renombre a la ciudad.
• La calzada de San Diego. Ejemplo de que la arquitectura moreliana es para servir y también para el gozo visual y la convivencia social. El ambiente tranquilo y la belleza de este espacio peatonal rodeado de leyendas le ha valido ser uno de los principales escenarios para las fotos de bodas, quinceañeras y más.
• El Santuario de Guadalupe, escenario socorrido para las bodas y uno de los enclaves que más sorprenden al visitante porque la sencillez de su fachada oculta y ejerce un fuerte contraste con el esplendor de su interior.
• El Zoológico de Morelia, que es uno de los más grandes del país y se ha fortalecido como aula al aire libre. Poseedor de una importante colección faunística, que incluye garzas que pasan el día en los lagos y lagunas cercanas y regresan al parque por la tarde para pernoctar en las inmediaciones de su lago artificial.
Además de todos estos lugares, son de gran atractivo la gran oferta gastronómica que inicia con los tradicionales gaspachos, favoritos de los morelianos, así como los recorridos en la bicioruga, así como los domingos de ciclovía para disfrutar la ciudad en bicicleta propia o rentada.